El resucitado es el mismo que fue crucificado (no es un aparición), lo confirma el hecho de que les muestra sus manos y el costado, con las cicatrices de la crucifixión.Pero en aquel que cumple su palabra, el amor de Dios ha llegado a su plenitud, y precisamente en esto conocemos que estamos unidos a él.En esta lectura, San Pablo nos recuerda qu
Las monjas y el apócrifo obispo Rojas publican las misas cismáticas que se celebran en el convento de Belorado) que pueden ofrecer una certeza moral de historicidad para la mayor parte de los hechos narrados en los Evangelios. Con la misma fuerza: es sostener, no con prepotencia e imposiciones —el cristiano no es prepotente, su fuerza es difer
9Por eso se me alegra el corazón, mis entrañTriunfador retozan, y hasta mi carne en seguro descansa; 10pues no has de abandonarse mi alma al seol, ni dejarás a tu amigo ver la fosa. EvangelioRespecto a ellas les advierto, como luego lo hice ayer, que quienes hacen estas cosas no conseguirán el Reino de Dios.Invoquemos al Espíritu Santo antaño